lunes, 14 de noviembre de 2011

"Bug - Bicho", de Miguel Ángel Martín"

Adviértase el detalle metalingüístico de la foto...

Asqueroso. Maravilloso. Desagradable. Adorable. 
Miguel Ángel Martín me encanta. Desde que tuve entre mis garras aquél "RubberFlesh" y toda su "obra grunge" sabía que sería un grande entre los grandes. Más leído allende los mares que por nuestros lares, Martín no se anda con chiquitas a la hora de plasmar su enfermizo imaginario, digno del Cronenberg más hardcore. Siguió dibujando en la década de los noventa, y también guionizando piezas teatrales y algún que otro cortometraje. Pero entonces llegó "Brian the Brain" y su obra se dió a conocer al "gran público". 

Yo también soy un pedazo de bicho...

A mí es que su trazo, sus personajes, su narrativa me deja absolutamente alucinado, y lea lo que lea de él, se me queda días y días dando vueltas en mi felina cabeza. "Bug" eran historias cortas, sin palabras, que venían a completar las páginas de los cuadernillos del citado "Brian The Brain"editados entre 1995 y 2003 por La Cúpula. La inquieta editorial Reino de Cordelia ha tenido a bien publicarlas independientemente, y aquí estoy yo para alabarlas. En "Bug" encontramos a esos diminutos amiguitos llamados parásitos, microbios, gusanos, bichos microscópicos que viven su larvaria vida en nuestros cuerpos, nuestros alimentos y nuestros fluidos. Diez historias cortas y una galería de asquerosos microorganismos que comen, muerden, rasgan, vomitan, segregan y patean su micromundo con el único fin que compartimos todos: la supervivencia. Sin palabras, sólo Miguel Ángel Martín

Aquí pretendo disimular, pero el mordisco a "Bug" se ve a la legua...

4 comentarios:

  1. La bibliotecaria de Redfield Hall24 de noviembre de 2011, 19:29

    Byron, no disimules, que se nota el mordisco de gusto en la cubierta del libro :-) Por cierto, paséate por mi blog, creo que te gustará el último libro... ¡Miau!

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  2. Bibliotecaria, me has pillado, miau, miau, miau!
    ¡Bien por tu entrada, conocía el libro, y lo he pedido a Santa Miau-Claus para estas navidades! Precioso Gala, por cierto. ¡Arrumacos!

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  3. Perdón, soy Byron, claro, entiendo que así lo habías entendido, bibliotecaria. ¡Miau!

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  4. La bibliotecaria de Redfield Hall2 de diciembre de 2011, 7:21

    ¡Gracias, Byron! Lo entendí desde el primer momento. Te envío cosquillas por aquí y por mi biblioteca. Deberías participar en un libro gatuno. Miau.

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